carport cerrado
Guía completa sobre el carport cerrado

El carport cerrado, una alternativa ingeniosa al garaje tradicional, se está convirtiendo en una opción cada vez más popular para proteger los vehículos. Esta estructura, que se caracteriza por su simplicidad de montaje y su costo accesible, ofrece una protección efectiva contra las inclemencias del tiempo y los daños externos. A diferencia del garaje de obra, el carport cerrado no requiere trabajos pesados, lo que lo convierte en una elección sensata para quienes buscan una solución rápida y menos costosa. Descubre cómo instalar un carport cerrado y la normativa que debes seguir para tener uno.

Presentación del carport cerrado

El carport cerrado se caracteriza por su estructura no de obra, generalmente sostenida por dos o cuatro postes. Puede estar adosado a un edificio existente o ser autoportante, ofreciendo así flexibilidad en la elección de su ubicación.

Los materiales utilizados para su construcción varían, incluyendo:

  • la madera
  • el PVC
  • el aluminio
  • el acero galvanizado

cada uno con ventajas e inconvenientes específicos. El precio de un carport cerrado oscila entre 800 y 10,000 euros, dependiendo de los materiales, las dimensiones y las especificaciones de la construcción.

En la empresa, el carport solar u ombrière fotovoltaica podría ser pronto obligatorio en los aparcamientos para lograr ahorros energéticos.

Antes de lanzar la instalación de este refugio, piensa en declarar los trabajos relacionados.

Costes de instalación y precio de un carport cerrado

La instalación de un carport cerrado es relativamente rápida, realizándose en uno o dos días.
Los costos de mano de obra para esta instalación varían entre 450 y 700 euros, a los que se suman los costes relacionados con la cimentación, como una losa de hormigón o macizos de hormigón.

Para ayudar a la comprensión, aquí tienes un cuadro que detalla algunos ejemplos de precios de carports cerrados según sus características:

Carport Características Superficie (m²) Precio (€)
1 Material principal: metal tratado anticorrosión, Tabiques: chapa (tratada), Puerta: doble, corredera 11 500
2 Material principal: Madera, pino, Puerta: batiente, doble (esp. 20mm) 16 2500
3 Material principal: Madera, pino, Puerta: batiente, doble (esp. 44mm) 36 4600

Diferentes tipos de carports cerrados

Los tipos de carports cerrados varían según su estructura (adosada o autoportante) y los materiales utilizados.

Cada material presenta ventajas distintas, como el PVC por su relación calidad-precio y su ausencia de mantenimiento, o la madera por su aspecto natural y su versatilidad.

El acero galvanizado es conocido por su robustez y durabilidad, mientras que el aluminio se destaca por su ligereza y facilidad de montaje.

Carport o garaje: criterios de elección

La elección entre un carport cerrado y un garaje de obra depende de varios factores.

El carport cerrado es menos costoso, más rápido de instalar, y ofrece cierta modularidad.
Sin embargo, generalmente es menos seguro que un garaje de obra y no permite un acceso directo a la casa.

Preparación del terreno y montaje del techo

La preparación del terreno es un paso crucial antes de la instalación de un carport.
El suelo debe estar perfectamente plano y nivelado.

La construcción del techo varía según el tipo de techo elegido, y es esencial respetar ciertas distancias al instalar los perfiles y las vigas.

El acabado implica la colocación de canalones, bajantes y, si es necesario, la pintura de la madera.

Costes adicionales y normativa

Los costes adicionales pueden incluir accesorios como un techo transparente, una losa de hormigón, una calzada, un punto de recarga para vehículos eléctricos, iluminación o un cobertizo adjunto.

La construcción de un carport cerrado requiere varias autorizaciones y trámites administrativos, que pueden variar según la ubicación y las regulaciones locales.

En primer lugar, es esencial informarse en el ayuntamiento o en el servicio de urbanismo local para conocer las normas de urbanismo vigentes.
Generalmente, para un carport pequeño, es suficiente una declaración previa de obras.

Sin embargo, si la superficie del carport supera cierto umbral (a menudo 20 m²), puede ser necesario un permiso de construcción. También es importante verificar si el carport respeta las reglas del plan urbanístico local (PLU) o del plan de uso del suelo (POS), especialmente en términos de distancia respecto a los límites de la propiedad, altura y materiales utilizados.

En algunos casos, puede ser necesario el acuerdo de la comunidad de propietarios o de los vecinos, especialmente si la construcción afecta a la vista o al acceso a su propiedad. Por último, no hay que olvidar informarse sobre los posibles impuestos o contribuciones vinculados a la construcción, como el impuesto de urbanización.